El aprendizaje de la esgrima japonesa - Kenjutsu
El
Proyecto Kuranau es una iniciativa de rescate, preservación del legado de la
esgrima tradicional japonesa, a través del desarrollo, estudio y registro de su
práctica, siguiendo los principios, criterios y fundamentos que han sido
legados junto con la tradición y priorizándolos, y a la vez favoreciéndose de todos
los recursos y condiciones de que en el presente dispone.
El
proyecto profundiza la idea de que la práctica de la esgrima tradicional
japonesa excede a cualquiera de sus aplicaciones, y que en el presente contexto
histórico, lejos de resultar útil sólo en determinadas aplicaciones (policial,
militar, deportiva, cultural, etc.), resulta importante preservar y desarrollar
en su forma pura en tanto permite formar personas de mejor calidad en el sentido
más literal posible (individuos en mejor uso de sus facultades, habilidades,
competencias e inteligencia).
El
Proyecto Kuranau esboza tanto a nivel teórico como práctico un planteamiento
que da un paso adelante, excediendo y trascendiendo la visión de las artes marciales
aplicadas, de cara a un estancamiento en la evolución de la esgrima tradicional
japonesa. En este sentido la visión deportiva de la esgrima ha desembocado en
la incorporación de aspectos exagerados y teatrales (artes marciales extremas)
que cumplen con una serie de criterios deportivos modernos, pero se alejan, ya
de un modo definitivo, de los criterios tradicionales que inicialmente le habían
dado forma.
La
propuesta es, en éste momento histórico (y valiéndose de una serie de recursos
materiales, metodológicos y procedimentales de los que antes no se disponían),
reincorporar y desarrollar una práctica que no solo dé cuenta de los aspectos
prácticos tradicionales, sino también resulte útil, operativa y coherente, y
que siguiendo el principio de la relación entre la personalidad y la técnica,
permita un desarrollo de la habilidad combativa humana, que permita ser
extrapolada a cualquier otra área (lo cual se sigue, también, de un principio
relacionado con la perfección de la técnica y la maestría). Para esto, se ha
tomado una práctica tradicional, legada bajo el nombre de Mittsu Seishin Ryu, como
principal referente.
El
término Kenjutsu deriva de la conjunción de los caracteres “Ken” y “Jutsu” y se
refiere a la práctica de la esgrima tradicional japonesa como un arte – ciencia
(en el lenguaje tradicional japonés no existía una diferencia categórica entre
arte y ciencia idéntica a la de la idiosincrasia europea) del desarrollo de la
habilidad de esgrimir la espada, constituyendo, si se quiere, un oficio, y
formando, en sentido tradicional, a un “profesional” o experto en el manejo y
uso de la espada.
El
desarrollo de las habilidades se logra a través de distintos tipos de
prácticas:
Suburi:
se refiere a un conjunto de ejercicios ejecutados en vacío, hechos con la
intención de ajustar la técnica al cuerpo a través de un acuerdo físico logrado
a través de una constante repetición siguiendo una serie de criterios.
Katachi:
figuras fijas que se ejecutan a un ritmo y una forma que van a acomodar el
cuerpo y la corporalidad a una ejecución técnica entendida como pura.
Kaeshi:
se refieren, en este caso, a la acción de contraatacar, involucrando por adelantado
las de ataque y defensa. En la práctica de Kaeshi se vacía la técnica pura y,
ante la presencia del otro, aparece la acomodación de la técnica y la variación
como habilidades requeridas.
Bunkai:
literalmente “deconstrucción” o “descomposición”, se refiere al análisis de las
técnicas contenidas en una Kata encadenada.
Keiko:
se refiere a la puesta en práctica de lo que se ha aprendido. No consiste
meramente en combatir contra otro, sino en enfrentar distintos planteamientos
en orden de practicar y en orden de experimentar con distintos elementos,
fundamentos y/o técnicas.